La falta de lluvias que atraviesa Panamá ocasionó que la profundidad de agua de su canal internacional y de sus esclusas disminuyan considerablemente en los últimos meses.
Esta situación obligó a la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) a aplicar varias medidas de mitigación, con el objetivo de conservar el agua en medio de una grave sequía.
Por ejemplo, se redujo el número de tránsito de buques por día de 38 a 32; además se implementó una reducción escalonada del calado que bajó hasta los 43 pies (13.11 metros), cuando el máximo que ofrece la vía es de 50 pies (15.24 metros).
Por ello, datos de la ACP señalan que hasta el miércoles 23 de agosto más de 120 buques (con o sin reserva) están a la espera de poder transitar por el Canal de Panamá. En circunstancias normales, el número es de 90 naves.
Las entradas de la vía navegable en los océanos Pacífico y Atlántico registran filas de buques con más de 20 días de espera. La mayoría son graneleros o metaneros que suelen reservar con poca antelación.
A finales de julio, el administrador del canal, Ricaurte Vásquez, dijo que las restricciones podrían mantenerse durante el resto del año, por lo que se espera que la sequía elimine alrededor de $ 200 millones en ingresos del canal el próximo año si los bajos niveles de precipitaciones persisten durante el otoño y el invierno septentrional.
La sequía no ha causado grandes problemas a los portacontenedores, los mayores usuarios del canal en términos de tránsitos. Esto es porque la mayoría de estas naves gozan de un estatus preferente porque utilizan horarios fijos y reservan sus travesías con hasta un año de antelación. Pero algunos se ven atrapados en el laberinto y tienen que pagar peajes varias veces superiores a la media.
«Teníamos dos buques que no podían reservar y era bastante caro», indicó Lars Oestergaard Nielsen, jefe de entrega al cliente de Maersk en las Américas. «Fuimos a una subasta y pagamos $ 900.000, además de $ 400.000 de peaje normal por cada nave que cruzara».
La ACP mencionó que los buques tienen total libertad de elegir su ruta. «Si las circunstancias lo exigen y los clientes eligen temporalmente otra ruta, respetamos y comprendemos su decisión. Nuestro principal objetivo sigue siendo la fiabilidad de nuestros servicios”.