La producción de tilapia va ganando espacio en varios cantones y comunidades del Ecuador, el cultivo de la especie se ha convertido en una buena alternativa de ingreso y auto sustento, por lo que desde las instituciones públicas se impulsan planes y proyectos para su adecuado desarrollo.
Desde la Subsecretaría de Acuacultura del Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca (MPCEIP), por ejemplo, se promueve esta actividad productiva en la región costa y valles de la región interandina (zonas cálidas), a través del proyecto de inversión ‘Mejora en la Competitividad del Sector Acuícola y Pesquero’, con el cual se producen alevines de tilapia de calidad en la estación piscícola Cachari para posteriormente ser donados a los pequeños y medianos piscicultores o vendidos bajo las políticas de fomento productivo.
Milton Rosado, subsecretario de Acuacultura, manifiesta que la iniciativa capacita y brinda asistencia técnica a 739 piscicultores de 22 cantones de las provincias de Manabí, Santo Domingo de Los Tsáchilas, Guayas, El Oro, Loja, Azuay, Bolívar y Tungurahua, a quienes se les ha dotado de 261.371 alevines de tilapia roja y negra. Para el desarrollo de este programa -comenta- se adquirieron nuevos reproductores de la especie para mejorar la línea genética e incrementar la producción. Adicionalmente, se ha fortalecido al personal técnico para realizar transferencia de conocimientos y asistencias a los productores, ampliando así la cobertura.
“La Subsecretaría de Acuacultura, realiza dotaciones de alevines como incentivo productivo a los pequeños y medianos piscicultores u organizaciones de la Economía Popular y Solidaria, para la implementación de cultivos acuícolas por una sola vez y posteriormente vendidos a bajo costo para el fomento productivo”, reseña.
Como parte del proceso de acompañamiento los piscicultores reciben capacitaciones e inspecciones y se los guía en temas referentes a la actividad acuícola como la mejora de las condiciones de sus cultivos. Asimismo, los especialistas realizan análisis de viabilidad de los mismos, tomando en consideración los parámetros físicos y químicos del agua (temperatura, oxígeno y pH), calidad de suelo y fuente continua de agua, para que de esta forma los productores puedan ejecutar la producción de una manera óptima y en el menor tiempo posible.
Milton Rosado, destaca que la producción de tilapia tiene un importante potencial de negocio, la clave -remarca- está en encontrar un punto de equilibrio para garantizar la rentabilidad e incremento de ingresos, ya que la base del negocio es el volumen de producción. La rentabilidad dependerá del sistema y volumen de producción, mientras más peces se siembre por metro cuadrado, en sistemas súper intensivos o intensivos, mayor productividad se verá reflejada en las ganancias y dilución de los costos operativos.
“Básicamente la inversión va a depender del sistema de cultivo a utilizar, en un cultivo extensivo se invertiría entre 1.250 dólares por un estanque de tierra (construcción, tubería y malla anti pájaros) de 1.000 metros cúbicos, más en costo del alimento balanceado, alevines, mano de obra y combustible; mientras que, en un sistema intensivo estos valores se multiplican entre 10 y 50 veces más dependiendo los valores a producir”, asegura.
Desde la Prefectura de Esmeraldas también se han desarrollado iniciativas para impulsar el cultivo de esta especie. Patricio López, director del Departamento de Gestión de Fomento y Desarrollo Productivo, cuenta que, con el afán de mejorar la economía de las familias, en mayo del año pasado se puso en marcha un proyecto para la producción de tilapia en estanques circulares de geomembrana en la comunidad de Tábule, parroquia Tachina. La iniciativa se desarrolló junto a la Asociación de Producción Agropecuaria (Asogrocipe), que anteriormente había gestionado un préstamo con Ban Ecuador para sembrar camarón en geomembrana, pero que finalmente no les dio resultado.
“Como fomento productivo dialogamos con la asociación, ellos nos presentaron una solicitud para que los apoyemos y entregamos un monto de $ 10.000, aproximadamente, para que adquirieran la geomembrana, los alevines de tilapia, el alimento y las bombas de agua”, señala.
En total, se construyeron 11 estanques circulares de geomembrana, cada uno de 1,20 metros de alto en los que se ubicaron 30.000 alevines de tilapia y con los que se espera realizar tres cosechas por año con la producción de aproximadamente 10.000 libras de tilapia anuales. Se estima que unas 200 familias se han beneficiado con el proyecto.
La primera cosecha de tilapia de la iniciativa se llevó a cabo en octubre pasado y contó con la presencia del ministro de Agricultura, Xavier Lazo. Las ganancias obtenidas servirán para incrementar la producción y abrir el mercado.
López afirma que, en los actuales momentos, desde la Prefectura se impulsa el cultivo de la tilapia, ya no como una cuestión productiva, sino más bien como un tema de soberanía alimentaria, especialmente en comunidades con altos niveles de pobreza. Ahora se proporciona asesoría técnica, alevines de tilapia, alimento, y recursos para armar piscinas en tierra con geomembrana en las comunidades Chachis y afrodescendientes del norte de la provincia.
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